El Objetivo de este tipo de Fotografía es retratar el producto aislado, normalmente con un fondo neutro (blanco, negro o gris). El destino de este trabajo es un catalogo impreso o una página Web. La postproducción suele ser sencilla en la cual se corrigen los colores (para que sean lo más parecidos al producto real), temperatura de color y pequeños defectos del producto (manchas, motas de polvo).
En algunas ocasiones el fondo se suele recortar para poder montar el objeto en otro fondo, con su correspondiente sombra artificial o reflejo.
Éste tipo de fotografía normalmente retrata el objeto, o la persona; en el caso de fotografía de productos cosméticos, accesorios, fotografía de moda, de lifestyle, etc. en un contexto específico, a veces con otros objetos de adorno (lo que se suele llamar un bodegón) y requiere normalmente una postproducción mucho más compleja, un ejemplo de este tipo de trabajo es la fotografía publicitaria de bebidas: se suelen fotografiar las distintas partes de la botella y el proceso de iluminación suele ser más sofisticado, El destino de las fotografías publicitarias normalmente es para anuncios en revistas y periódicos, campañas de vallas publicitarias o marquesinas.
Una diferencia importante entre ambas es el coste de la producción: la fotografía publicitaria requiere técnicas de fotografía elaboradas mucho más tiempo para realizarla que la foto de producto, por lo que es sustancialmente más cara. Además, en fotografía publicitaria las fotografías a realizar se cuentan por pocas unidades (desde una a media docena de fotografías de promedio por sesión). En cambio, en la fotografía de producto para web (o e-commerce) o para catálogo, el número de fotografías es normalmente más elevado (una docena en adelante si la empresa o cliente lo requiere).
Dentro de este mundo de la foto de producto existe un concepto muy importante el cual es la fotografía de alimentos. Un Platillo fresco y limpio resulta ser mucho más apetitoso y es el mejor gancho para aumentar las ventas en cualquier negocio de comida. Es indispensable mostrar una correcta imagen de los platillos que ofrecen en sus cartas, menú o publicidad.
Este tipo de fotografía suele hacerse en colaboración con el chef y un estilista de alimentos ya que por su complejidad es necesario una o unas personas encargadas del arte y manejo de todos los platillos. El papel del estilista de alimentos es hacer que los alimentos se vean atractivos en fotografía, necesita su tiempo para organizar artísticamente la comida, por lo general tienen conocimientos culinarios y técnicas de cocina.
En definitiva, con unas fotografías de producto profesionales, podrás conseguir que tus clientes o posibles clientes tengan la visión correcta del producto que vendes. Una fotografía creativa podrá mostrar todas las características y la calidad del mismo, además de atraer la atención del usuario.